Cuando piensas en un destino donde la Navidad es más Navidad, donde el espíritu navideño es aún más profundo, te imaginas nieve, luces, ambiente y personas que cómo tú piensan que esta es la mejor fecha del año.
Hemos seleccionado algunos destinos que cumplen con esos requisitos para vivir la Navidad de una forma especial:
Nueva York (EEUU)
Lo has visto en muchas películas, el lugar perfecto para imbuirte de espíritu navideño, esta ciudad es sin duda el mejor destino. Hay muchas actividades como patinar en el Rockefeller Center, descubrir el escaparate navideño de Bergdorf Goodman en la Quinta Avenida, pasear por Dyker Heights, en Brooklyn, donde los vecinos compiten para crear la mejor decoración navideña y acercarte a la navidad al más puro estilo alemán en Rolf’s.
Madrid (España)
En plena Puerta del Sol está el reloj en el que durante años a dado las campanadas que daban paso al año nuevo. Se está popularizando asistir también a uno de los tres ensayos: a las doce de la mañana del día 30 de diciembre, a las doce de la noche del día 30 de diciembre y a las doce de la mañana del día 31 de diciembre. Además encontrarás muchos espectáculos singulares y el mercadillo de belenes y artículos de broma de la Plaza Mayor.
Brujas (Bélgica)
Esta ciudad de cuento de hadas alberga un mercadillo navideño del 24 de noviembre al 2 de enero, pero si prefieres huir de las multitudes, disfrutarás simplemente con recorrer sus calles adoquinadas y probar algunos de sus chocolates.
Laponia (Finlandia)
Este destino cuenta con la famosa gruta de San Nicolás, pero además podrás dar de comer a sus renos y disfrutar de uno de los paisajes más espectaculares del mundo.
Estrasburgo ( Francia)
Muchas personas buscan el espíritu navideño en su antiguo mercadillo , que se remonta a 1570, pero esta ciudad ofrece otros atractivos invernales como pasear por su barrio histórico o degustar las exquisiteces navideñas en su mercadillo gastronómico.
Copenhagen (Dinamarca)
Aquí nació el concepto hygge que aboga por las cosas sencillas, bonitas y acogedoras para ser más feliz), y Copenhague está tan adornada que incluso la pista de aterrizaje del aeropuerto cuenta con un árbol de Navidad. Las calles se llenan de luces y los comercios se esfuerzan por mostrar elegantes decoraciones navideñas.